Un portafolio puede incluir una amplia variedad de elementos, y la elección de los ítems específicos dependerá de los objetivos de la evaluación y del contexto educativo o profesional. Pueden ser entre otros: historia de vida, documentos, artículos de revistas, de periódicos, dibujos, fotografías, secciones de actividades, evaluaciones, folletos, etc.

En el mapa del sitio del inicio puedes encontrar las partes en que se secciona este portafolio y qué puedes encontrar en cada una. 

El portafolio se convierte en una herramienta integral de evaluación y aprendizaje que ofrece múltiples beneficios. En primer lugar, permite a los estudiantes reflexionar sobre su propio proceso de aprendizaje, ya que deben seleccionar y organizar sus trabajos y reflexiones en el portafolio. Esto les brinda la oportunidad de examinar su progreso y crecimiento en relación con los objetivos y estándares de aprendizaje establecidos. La pedagogía por portafolios también fomenta la reflexión crítica. Los estudiantes pueden escribir reflexiones que acompañan a sus trabajos, analizando sus propias experiencias y procesos de aprendizaje. Esto les permite identificar áreas de mejora y considerar cómo aplicar lo aprendido en situaciones futuras.

En comparación con las pruebas estandarizadas, la evaluación por portafolios carece de uniformidad en su diseño y contenido. Esto puede dificultar la comparación de los resultados entre diferentes estudiantes o grupos. Por otra parte, Algunas habilidades y competencias pueden ser difíciles de medir mediante la evaluación de portafolios, especialmente aquellas que no pueden ser fácilmente demostradas a través de evidencias escritas o visuales (participación en clase, elocuencia, etc)